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Errores más comunes al acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad.

Acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad - JDV Consultants

Hoy retomamos un tema que, además de resultar muy interesante, es uno de los que generan más consultas en nuestro despacho de abogados en Barcelona. Nos referimos a la famosa Ley de Segunda Oportunidad, de cuya tramitación y gestión nos hemos hecho expertos.

Por eso, nadie mejor que nuestro equipo para abordar algunos de los errores que comenten muchas personas cuando intentan acogerse a ella. ¿Quieres saber qué fallos se deben evitar para poder acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad sin problemas? te los contamos.

Ley de Segunda Oportunidad

En este espacio ya hemos abordado este tema en múltiples ocasiones explicándote qué es la Ley de Segunda Oportunidad, quién puede acogerse a ella, qué requisitos se deben cumplir o de qué pasos deben seguirse para su tramitación.

Como seguro recuerdas, la Ley de la Segunda Oportunidad, aprobada mediante la Ley 25/2015, tiene como objetivo principal proporcionar un mecanismo de alivio financiero a personas físicas que se encuentran en una situación de insolvencia insostenible. No obstante, a pesar de sus beneficios, la aplicación de esta ley no está exenta de complejidades que pueden llevar a errores significativos por parte de los deudores. Identificar estos errores y entender cómo evitarlos es crucial para maximizar las posibilidades de éxito en el proceso.

¿Qué fallos suelen darse a la hora de tramitar la Ley de Segunda Oportunidad? 

1.- No preparar la documentación requerida

Uno de los errores más frecuentes es no preparar adecuadamente la documentación requerida. La Ley exige que el deudor presente un inventario completo de su patrimonio, un listado exhaustivo de acreedores y un plan detallado de pagos o solicitud de exoneración.

Subestimar la importancia de la exhaustividad y precisión en esta documentación puede llevar a la desestimación de su solicitud o a demoras innecesarias en el proceso. Es fundamental que el deudor se asesore correctamente, acuda a un equipo profesional y experto como el que te espera en JDV Iuris Consultants y dedique el tiempo necesario a recopilar y presentar toda la documentación requerida de manera ordenada y detallada.

2.- No analizar el acuerdo extrajudicial de pagos (AEP)

Aunque el AEP (Acuerdo Extrajudicial de Pagos) es un paso previo al beneficio de la exoneración del pasivo insatisfecho (EPI), algunos deudores lo abordan de manera superficial, creyendo que es meramente una formalidad. Sin embargo, la ley exige que se demuestre un esfuerzo real y de buena fe para llegar a un acuerdo con los acreedores. La falta de una negociación genuina o la omisión de incluir todas las deudas en el AEP puede resultar en la nulidad del procedimiento o en la imposibilidad de acceder a la exoneración de deudas.

3.- No contemplar las posibles impugnaciones de los acreedores

Para acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad es necesario contemplar las posibles impugnaciones por parte de los acreedores. A menudo, los deudores desconocen que los acreedores pueden oponerse a la exoneración de las deudas, alegando, por ejemplo, mala fe o fraude en la constitución de la deuda. El no anticipar y preparar una defensa adecuada frente a posibles impugnaciones puede resultar en la revocación de la exoneración y, en consecuencia, en la perpetuación de la deuda.

4.- No comprender adecuadamente las deudas exonerables

La Ley de la Segunda Oportunidad no permite la exoneración de determinadas deudas, como las de carácter público (deudas tributarias y con la Seguridad Social) o las derivadas de responsabilidades civiles. La errónea interpretación de este aspecto puede llevar a expectativas infundadas y a frustraciones durante el proceso.

 

De ahí que, de nuevo, insistamos en lo importante que resulta acudir a un despacho de abogados que cuente con un equipo especializado en todo lo que rodea esta ley. Un equipo con experiencia en el análisis, preparación, tramitación y asistencia legal es clave si quieres tener una segunda oportunidad para empezar una nueva vida libre de deudas imposibles de asumir.